¿Por qué creemos que no va a pasar nada malo?
Sesgo de normalidad
explicó.¿Qué es el sesgo de normalidad?
El sesgo de normalidad describe nuestra tendencia a subestimar la posibilidad de catástrofes y a creer que la vida continuará con normalidad, incluso ante amenazas o crisis importantes.
Dónde se produce este sesgo
Consideremos el siguiente escenario hipotético: Emma, una planificadora meticulosa, vive en una región propensa a sufrir terremotos ocasionales. A pesar del historial de actividad sísmica de la zona, Emma nunca ha experimentado un terremoto importante en su vida. En consecuencia, no le da importancia a preparar un kit de emergencia o formular un plan de evacuación, firmemente convencida de que su vida cotidiana permanecerá inalterada. Esas cosas les pasan a los demás, no a mí", sigue diciéndose a sí misma.
Un día, mientras Emma sigue con su rutina habitual, siente un sutil temblor bajo sus pies. En lugar de reconocer inmediatamente el peligro potencial y tomar medidas de precaución, ignora la sensación, atribuyéndola al paso de un camión de obras o a cualquier otra causa mundana. En cuestión de segundos, el ligero temblor se convierte en una fuerte sacudida y Emma se encuentra atrapada en su apartamento durante un gran terremoto.
Como muestra este ejemplo, el sesgo de normalidad se produce cuando las personas se enfrentan a amenazas potenciales pero instintivamente les restan importancia. La confianza de Emma en la previsibilidad de su rutina diaria le impidió reconocer los riesgos de un gran terremoto y la necesidad de prepararse en consecuencia. Este sesgo cognitivo no se limita a las catástrofes naturales, sino que impregna diversos aspectos de nuestras vidas, afectando a nuestra capacidad para reconocer y responder eficazmente a retos inminentes como la incertidumbre financiera y las crisis sanitarias.