Marco Aurelio

Thinker
Marcus Aurelius

El Rey Filósofo

Introducción

Emperador de profesión y filósofo de vida, Marco Aurelio fue una figura influyente en la Roma del siglo II.1 Aurelio buscó respuestas a cuestiones metafísicas y éticas, como: ¿cómo podemos alcanzar la felicidad?; ¿cómo puedo ser una buena persona?; ¿cuál es mi propósito?2

Hemos podido conocer sus reflexiones sobre estos temas a través de su único -pero increíblemente conocido- texto publicado, Meditaciones. Como las Meditaciones se componen de notas recopiladas y cavilaciones personales, el texto ofrece a los lectores una visión directa de la mente brillante del antiguo filósofo romano. Las citas y pasajes que componen las Meditaciones divulgan su filosofía estoica y pueden ayudar a guiarnos por un camino hacia la felicidad y la paz interior.

Aurelio es considerado a veces el "filósofo más citable" por su elocuente estilo de escritura, que suscitaba imágenes vívidas y frases que se quedaban grabadas en la mente de la gente. Sus filosofías siguen resonando entre nosotros hoy en día.1

Se necesita muy poco para tener una vida feliz; todo está dentro de ti, en tu forma de pensar.


- Aurelio, en su obra publicada Meditaciones.3

On their shoulders

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Estoicismo

El estoicismo es un antiguo movimiento filosófico que surgió durante el periodo helenístico (323 a.C. a 31 a.C.).4 El estoicismo sugiere que la filosofía es una forma de vivir una vida virtuosa, no sólo una disciplina académica, y que la filosofía es la única búsqueda que realmente importa en el gran esquema de las cosas. Las pequeñas cosas que ocupan la vida cotidiana de las personas son irrelevantes para nuestra felicidad. Según el estoicismo, la riqueza, la reputación o el disfrute no contribuyen realmente a una vida feliz; del mismo modo, la enfermedad, la pobreza o el dolor no restan valor a nuestra vida feliz.1 Sólo lo que nos hace virtuosos nos hace felices, mientras que el vicio es el ladrón de nuestra felicidad.

La filosofía estoica, aunque desconocida hoy en día, seguía siendo popular en la época de Aurelio. Aurelio reconocía que no era fácil vivir la vida como filósofo, ya que requería una gran dedicación, pero creía que era una empresa digna. Como muchos filósofos estoicos, Aurelio tenía una visión binaria sobre el bien y el mal, es decir, muy en blanco y negro. Lo que era virtuoso era cualquier cosa que hiciera a alguien justo, templado, valiente y libre, y lo que era malo eran las cosas que hacían lo contrario.1 Lo que permitía a alguien tener esas características virtuosas era su búsqueda de la filosofía tanto de forma práctica como filosófica, lo que le permitiría vivir de acuerdo con la naturaleza. Esto se debe a que la búsqueda de la filosofía ayudaba a las personas a comprender la "verdadera" naturaleza de las cosas; un ejemplo común es la investigación filosófica sobre qué es un alma.

Puesto que cosas como el dolor y el placer no influyen en nuestra felicidad, Aurelius sugirió que la gente necesitaba reformular sus pensamientos en torno a lo que es "bueno" o "malo". Si no contribuye a la felicidad general, no es ni bueno ni malo. Escribe en las Meditaciones: "Si algo externo te angustia, el dolor no se debe a la cosa en sí, sino a tu estimación de ella; y ésta tienes el poder de revocarla en cualquier momento".3

Aurelio creía que las personas debían dejar de centrarse en estas cosas y, en su lugar, examinar si sus acciones contribuían a la propia virtud. Una acción es virtuosa cuando se hace por comprensión, que es donde entra en juego la filosofía como forma de vida.1 La filosofía proporciona a alguien un estado cognitivo estable que le permite ver lo que es justo y virtuoso y actuar en consecuencia. La filosofía permite ser racional, lo que para el estoicismo es vivir de acuerdo con la naturaleza.

La felicidad como estado de ánimo

Uno de los motivos por los que el consejo estoico de Aurelio se centraba en el cambio de mentalidad es que, aunque no siempre podemos controlar lo que nos ocurre, sí podemos controlar cómo nos sentimos al respecto y cómo reaccionamos ante ello. Como escribe en Meditaciones, "tú tienes poder sobre tu mente, no sobre los acontecimientos externos. Date cuenta de esto y encontrarás la fuerza".3 Además, añade que "la felicidad de tu vida depende de la calidad de tus pensamientos".

La idea de que la felicidad es una mentalidad y no algo que se adquiere a través de la riqueza, el placer o los bienes materiales se apoya en la cinta hedónica. La cinta hedónica sugiere que nuestros niveles de felicidad tienden a permanecer en un nivel relativamente neutro porque nos adaptamos rápidamente a los acontecimientos que nos hacen felices o a las cosas que nos entristecen. La cinta hedónica estipula que algo que pensamos que podría hacernos felices (como comprar un coche nuevo) sólo nos hará más felices durante un momento fugaz y que, del mismo modo, algo que pensamos que podría entristecernos (como recibir una mala nota) sólo nos disgustará durante un breve espacio de tiempo.

Aurelio diría que nuestra felicidad tiende a ser indiferente a estas cosas, ya que sólo ser virtuoso puede contribuir verdaderamente a una felicidad duradera. Ser una buena persona está bajo nuestro propio control, por lo que debemos centrarnos en ese empeño. Debemos volvernos hacia dentro, hacia nuestra alma, o hacia nuestra "ciudadela interior", como la llamó en Meditaciones. Vivir desde este espacio dará a alguien una sensación de paz y libertad, pues se dará cuenta de que tiene la libertad de moldear su vida al tener el control de sus pensamientos.2

La vida te va a plantear retos, pero la forma en que respondas a ellos determinará si eres una persona feliz. Aurelio sugirió que los obstáculos nos brindan la mejor oportunidad para practicar nuestra virtud, ya que ponen a prueba nuestra paciencia y nos dan la oportunidad de responder de forma positiva.5 Escribió: "lo que se interpone en el camino se convierte en el camino".2 Volverse hacia uno mismo y no permitir que las adversidades te afecten es lo que te permite ser estoico. El modo en que otras personas se comportan o te tratan está fuera de tu control, pero si estás en paz contigo mismo, estas personas no deberían afectarte negativamente.

Aurelio también sugirió que nos centrásemos en las virtudes que ya tenemos; puede que no encarnemos todas y cada una de las características positivas, pero no debemos ser excesivamente críticos con nosotros mismos por lo que no tenemos. Deberíamos centrarnos en las virtudes que sí tenemos y asegurarnos de practicarlas.6

Centrarnos en lo que tenemos es otra práctica que Aurelio defendía con firmeza. En sus Meditaciones, escribió: "Cuando te levantes por la mañana, piensa en el privilegio que supone estar vivo, pensar, disfrutar y amar".3 En lugar de preocuparnos por las cosas que podrían salir mal o por las que no tenemos, deberíamos estar en el momento presente y disfrutar de lo que la vida nos ofrece. Sugirió que si hiciéramos todo como si fuera lo último que haríamos en nuestra vida, nos resultaría más fácil no dejar que las emociones nublaran nuestra racionalidad6.

Antecedentes históricos

Marco Aurelio (César Marco Aurelio Antonino Augusto) nació el 26 de abril de 121 d.C. en Roma.7 Su familia era muy prestigiosa: su abuelo era cónsul y prefecto de Roma, su tía estaba casada con un hombre que iba a ser el próximo emperador y su abuela iba a heredar una fortuna de su rica familia.7 Aurelio estaba bien preparado para su vida como hombre influyente y poderoso, aunque su camino hasta convertirse en emperador se basó más en la suerte que en otra cosa.

A los 15 años, en 136 d.C., Aurelio se comprometió con Ceionia Fabia, la hija de Cómodo, que acababa de ser nombrado sucesor del emperador. Sin embargo, un par de años más tarde, Cómodo murió y el compromiso se canceló. El actual emperador de Roma, Adriano, tuvo que nombrar a otro sucesor y esta vez eligió al marido de la tía de Aurelio, Tito, con tal de que adoptara al hijo de Marco y Cómodo, Antonio. Ambos sucederían entonces a Cómodo y se convertirían en emperadores conjuntos.7

Aunque Aurelio sabía que se convertiría en emperador a los 17 años, tuvo que esperar mucho tiempo hasta que Tito le entregara las riendas. Durante este tiempo, Aurelio se interesó por la filosofía estoica gracias a su maestro Fronto, que era la principal figura literaria de sociedad de su época. Aurelio mantendría una estrecha amistad con su maestro Fronto durante toda su vida, y las cartas entre ambos son las únicas cartas de amor (se desconoce si eran cartas de amor en un sentido romántico) que se conservan de la Antigüedad.8

Aurelio se sintió especialmente atraído por Epicteto, un filósofo estoico griego, después de que su amigo le recomendara su obra.1 Los escritos de Epicteto influyeron en Aurelio para que dedicara toda su vida a la filosofía. Al mismo tiempo, era aprendiz de Tito, y estaba aprendiendo el aspecto comercial y gubernamental de las cosas para prepararse para convertirse en emperador.7 Aunque Aurelio no le da las gracias directamente en las Meditaciones, es probable que Aurelio también hubiera recibido la influencia de Séneca, un destacado filósofo estoico.

Se casó con su prima en el año 145 d.C. (ésta era una práctica común en la antigua Roma), Annia Galeria Faustina. Recibió el cargo de cónsul junto a su hermano adoptivo. En 161, Cómodo murió, convirtiendo a Aurelio y Autonis en coemperadores. Fue la primera vez que Roma tuvo coemperadores, aunque se truncó al morir Antonio ocho años después.6 El reinado de Aurelio estuvo marcado por los conflictos militares, ya que Roma sufrió ataques de Alemania, rebeliones en Italia y Egipto, así como por una peste que arrasó Italia y se cobró muchas vidas.1 A pesar de todas estas penurias, el estoicismo de Aurelio le permitió no dejar que estos terribles acontecimientos afectaran a su paz interior. De hecho, se cree que muchas de las notas que más tarde se publicaron en las Meditaciones fueron escritas mientras Aurelio organizaba campañas militares.1

A pesar de todo el caos y las dificultades a las que se enfrentó Aurelio durante su época como emperador, se le considera el último de los "Cinco Buenos Emperadores". Mientras reinaron los cinco buenos emperadores, Roma disfrutó de un poder absoluto y se guió por la virtud. Los cinco buenos emperadores se habían convertido en emperadores por sucesión designada y no por derecho de nacimiento, lo que podría haberles empujado a querer demostrar que eran líderes virtuosos.6 El sucesor de Aurelio no siguió su ejemplo; cuando murió en 180, uno de sus hijos, Cómodo, se convirtió en emperador. El reinado de Cómodo marca el final de la época dorada de Roma, ya que aunque mantuvo un nivel de paz en Roma, su propio comportamiento no siguió los mismos principios virtuosos que había mantenido su padre.7

Ideas del filósofo más célebre

Para Aurelio, el filósofo estoico, "la perfección del carácter es esto: vivir cada día como si fuera el último, sin frenesí, sin apatía, sin fingimiento". Nos insta a "recordar que se necesita muy poco para tener una vida feliz".3

Aurelio siempre profesó que la gente sólo debe preocuparse de lo que puede controlar. Esta filosofía significa que el comportamiento de los demás no debe hacer que te desvíes de tu camino virtuoso. Escribió: "Cuando te levantes por la mañana, dite a ti mismo: las personas con las que trate hoy serán entrometidas, desagradecidas, arrogantes, deshonestas, celosas y hoscas. Son así porque no saben distinguir el bien del mal. Pero yo he visto la belleza del bien y la fealdad del mal, y he reconocido que el malhechor tiene una naturaleza afín a la mía, no de la misma sangre y nacimiento, pero sí de la misma mente, y posee una parte de lo divino. Por eso, ninguno de ellos puede hacerme daño. Nadie puede implicarme en la fealdad "3.

Él creía que las críticas de la gente hacia ti dicen más sobre la clase de persona que son ellos que sobre la clase de persona que eres tú. Afirma en Meditaciones: "Cuando otro te culpe o te odie, o la gente exprese críticas similares, ve a sus almas, penetra en su interior y observa qué clase de personas son. Te darás cuenta de que no hay necesidad de angustiarse porque tengan una opinión particular de ti".3

Aurelio también creía que la gente debía centrarse en el presente. Aconseja: "No actúes como si fueras a vivir diez mil años. La muerte se cierne sobre ti. Mientras vivas, mientras esté en tu mano, sé bueno". El futuro es algo que escapa a nuestro control, por lo que no debemos preocuparnos por él. Como él mismo afirma, "nunca hay necesidad de alterarse ni de preocuparse por cosas que no se pueden controlar. Esas cosas no piden que las juzgues. Déjalas en paz".3

Centrarte en el presente también te permite centrarte en lo que sí tienes. Escribió: "No te complazcas en sueños de tener lo que no tienes, sino haz un recuento de las principales bendiciones que posees, y luego recuerda con gratitud cómo las anhelarías si no fueran tuyas".3

En última instancia, instó a la gente a ser simplemente buena. Escribió en Meditaciones: "Haz lo correcto. Lo demás no importa. Con frío o con calor. Cansado o descansado. Despreciado u honrado. Moribundo... u ocupado con otras tareas... Mira hacia dentro. No dejes que se te escape la verdadera naturaleza de nada... cuando te veas sacudido, inevitablemente, por las circunstancias, vuelve enseguida a ti mismo, y no pierdas el ritmo más de lo que puedas evitar. Comprenderás mejor la armonía si vuelves una y otra vez a ella".3

¿Dónde podemos obtener más información?

Meditaciones es la única obra publicada conocida de Aurelio. Dividido en doce partes, el texto incorpora notas y garabatos personales de Aurelio. Puede adquirir una copia física aquí, o escuchar un audiolibro.

También puede escuchar el episodio del podcast de Historia de la Filosofía sobre Aurelio, titulado "El rey filósofo: Marco Aurelio". Los anfitriones del podcast exploran la vida de Aurelio, así como su filosofía estoica. Otro podcast dedicado a debatir todo lo relacionado con el estoicismo, The Daily Stoic, también tiene un episodio que gira en torno a Aurelio. Por último, el presentador de podcasts de la BBC Melvyn Bragg habla de la vida y la filosofía de Aurelio con invitados en este podcast.

También se han escrito varios libros sobre Aurelio. Marco Aurelio: A Guide for the Perplexed, de William Stephens, ofrece una introducción a Aurelio adecuada para quienes no estén muy versados en filosofía. Una vez dominados los conceptos básicos, se puede recurrir a La ciudadela interior: las meditaciones de Marco Aurelio, de Pierre Hadot, un libro que desvela significados ocultos más profundos de las Meditaciones de Aurelio. Si le interesa más saber quién fue el hombre Aurelio, puede consultar la biografía de Anthony Birley.

Referencias

  1. Kamtekar, R. (2010, 29 de noviembre). Marcus Aurelius. Stanford Encyclopedia of Philosophy. https://plato.stanford.edu/entries/marcus-aurelius/#LifWor
  2. Marco Aurelio: Deudas y lecciones. (2019, 9 de noviembre). Farnam Street. https://fs.blog/2014/08/marcus-aurelius-debts-and-lessons/
  3. Citas de Marco Aurelio. (s.f.). Goodreads. Extraído el 26 de abril de 2021, de https://www.goodreads.com/author/quotes/17212.Marcus_Aurelius
  4. Baltzly, D. (2018, 10 de abril). Estoicismo. Stanford Encyclopedia of Philosophy. https://plato.stanford.edu/entries/stoicism/#Phil
  5. Gregoire, C. (2014, 29 de marzo). Marco Aurelio y la clave de la felicidad. DailyGood: Noticias que inspiran. https://www.dailygood.org/story/680/marcus-aurelius-and-the-key-to-happiness/
  6. Holiday, R., & Hanselman, S. (2020, 31 de agosto). ¿Quién es Marco Aurelio? Conociendo al emperador romano. Daily Stoic. https://dailystoic.com/marcus-aurelius/
  7. Crook, J. A. (1998, 20 de julio). Marcus Aurelius. Encyclopedia Britannica. https://www.britannica.com/biography/Marcus-Aurelius-Roman-emperor
  8. Marco Aurelio. (2001, 2 de octubre). Wikipedia, la enciclopedia libre. Obtenido el 26 de abril de 2021, de https://en.wikipedia.org/wiki/Marcus_Aurelius#Legacy_and_reputation

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