Man jumping

Nudges: ¿Ingeniería social o política sensata?

read time - icon

0 min read

Feb 07, 2017

En un mundo que nos sobrecarga de información y tentaciones, es agradable recibir ayuda que nos oriente para tomar mejores decisiones. Esa es la idea que subyace a los nudges, un término amplio que engloba las técnicas de las ciencias del comportamiento que pretenden influir en nuestra forma de tomar decisiones.

La filosofía subyacente a los nudges es el paternalismo libertario: las personas deben ser libres de tomar las decisiones que quieran, pero los responsables políticos pueden presentar estas opciones de forma que conduzcan a los resultados deseados. Por ejemplo, los empleados contribuyen mucho más a sus planes de ahorro cuando se les inscribe automáticamente en un programa 401(k) que cuando tienen que optar por participar. Estas políticas ayudan a las personas a ahorrar más para la jubilación, un objetivo generalmente deseado que muchos no alcanzarían de otro modo.

¿Debería preocuparnos el uso de nudges?

Sin embargo, como señala Cass Sunstein, uno de los defensores más destacados del nudging, "puede haber una delgada línea entre un problema de autocontrol y un enfoque legítimo en el placer a corto plazo". A pesar de su rentabilidad y amplia aplicabilidad, sigue habiendo dudas legítimas sobre si debemos dar codazos, cuándo y cómo.

¿Deberían los responsables políticos influir en el modo en que las personas toman este tipo de decisiones? Aunque los nudges no imponen comportamientos como las leyes, ¿están manipulando a las personas para que tomen decisiones que no apoyarían después de reflexionar?

Nuestras respuestas a este tipo de preguntas dependen de muchos factores. En particular, investigaciones recientes de psicología social sugieren que la forma en que se presentan los nudges, y quién los presenta, influyen mucho en nuestra percepción de estas políticas.

About the Author

Read Next

Notes illustration

Eager to learn about how behavioral science can help your organization?