Escribo esto desde el Laboratorio de Neurociencia Ambiental de la Universidad de Chicago. Aquí estudiamos cómo afecta el entorno físico a los procesos afectivos y cognitivos, así como a los comportamientos humanos complejos. Nuestro objetivo general es cuantificar las relaciones entre el entorno físico y estos fenómenos psicológicos. En este artículo, escribiré sobre una de las principales líneas de investigación en las que he estado trabajando y que tiene implicaciones para el diseño de entornos saludables y cooperativos (Kotabe, Kardan y Berman, 2016).
¿Podemos diseñar un entorno que haga que la gente se comporte de forma más honesta?
En primer lugar, estamos trabajando en un proyecto para cuantificar la percepción del "desorden" en un entorno y, además, su efecto en un comportamiento humano complejo: el incumplimiento de las normas. El incumplimiento de las normas es de especial interés porque existe una teoría de las ciencias sociales extraordinariamente influyente llamada "teoría de las ventanas rotas" (Wilson y Kelling, 1982), según la cual los entornos desordenados dan lugar a comportamientos desordenados (incumplimiento de las normas).
Así se demostró en una serie de experimentos de campo publicados en la revista Science (Keizer, Lindenberg y Steg, 2008). Todas las explicaciones de esta teoría tienen algo en común: suponen que estos efectos se producen porque las personas que viven en entornos desordenados realizan algún tipo de razonamiento social complejo sobre, por ejemplo, la presencia de la policía, las normas de comportamiento del vecindario o la prevalencia de la pobreza (desorden social).
References
Keizer, K., Lindenberg, S., & Steg, L. (2008). La propagación del desorden. Science, 322, 1681-1685.
Kotabe, H.P., Kardan, O., & Berman, M.G. (2016, 13 de octubre). El orden del desorden: Deconstruyendo el Desorden Visual y su Efecto de Violación de Reglas. Revista de psicología experimental: General. Publicación anticipada en línea.
Wilson, J. Q., y Kelling, G. L. (1982). Broken windows. Atlantic Monthly, 249, 29-38.