Competencia

La idea básica

Cuando se busca a un profesional, ya sea un médico, un abogado o un profesor particular, se confía en que posee las habilidades y los conocimientos necesarios para ayudarle. A menudo, las personas tienen credenciales, como títulos universitarios, que les dan credibilidad y te aseguran que tienen las capacidades adecuadas para hacer el trabajo. Aunque el título no te proporciona pruebas basadas en la experiencia en su función, te da la seguridad de que alguien tiene al menos las capacidades básicas para realizar su trabajo.

Cuando alguien posee los atributos y la experiencia necesarios para desempeñar una tarea o encarnar un papel, decimos que es competente. La competencia puede definirse como los conocimientos, las habilidades, las actitudes, los valores y el juicio necesarios para desempeñar el trabajo de una profesión concreta.1 La competencia, o al menos la percepción de competencia, es crucial para los expertos de cualquier campo, ya que sin ella los demás no confiarán en que realicen su trabajo con eficacia. Debemos creer que nuestros políticos, psicólogos y científicos son competentes en lo que hacen y, por tanto, que debemos escuchar sus consejos.

Lo que hace competente a una persona varía de un campo a otro, e incluso de una persona a otra. Si le preguntaran a usted qué hace que un médico sea bueno, su respuesta podría ser distinta de la de su amigo. Las cosas que enumeras -tal vez empatía, conocimientos y buenos modales- son las características que tú personalmente crees que hacen que un médico sea competente.

Nuestra competencia para sobresalir en la vida depende de nuestra capacidad para hacer lo que podemos hacer.


- Director General de The WhistleMag, Sijin BT2

Términos clave

Teoría de la reducción de impulsos: teoría que explica la motivación para el comportamiento como un deseo de disminuir los impulsos desagradables. Se basa en la homeostasis, la idea de que el cuerpo trabaja para mantener un equilibrio confortable. Si uno de los impulsos, como el hambre, altera ese equilibrio, se adopta un comportamiento para restablecerlo, como comer.4

Effectance Motivation/Urge: teoría que explica la motivación como el deseo de ser eficaz. El sentimiento positivo que una persona experimenta tras superar una tarea es la razón por la que se involucra en el comportamiento en primer lugar. La motivación, por lo tanto, es el resultado del refuerzo positivo, que hace que una persona aprenda en qué tareas es eficaz y continúe realizándolas.5

Conductismo: enfoque psicológico que hace hincapié en el estudio de los procesos observables (comportamiento). A la hora de medir la competencia, muchos modelos adoptan un enfoque conductista, ya que se centran en el resultado (éxito o no) de la conducta, no en el estado mental que impulsó la conducta.6

Refuerzo positivo: método a través del cual aprendemos. Cuando realizamos un comportamiento que tiene un resultado positivo, es más probable que lo repitamos. Por lo tanto, es más probable que adoptemos comportamientos en los que somos competentes.

Historia

La competencia fue estudiada por primera vez por Robert White, psicólogo clínico. Su artículo de 1959 "Motivation reconsidered: El concepto de competencia", publicado en la revista Psychological Review, fue su contribución más famosa al campo de la psicología. En este artículo, White sugería que la competencia era un impulso humano fundamental que motivaba a los individuos. 7 Sugirió que la competencia, y las actividades que nos hacen sentir competentes, son motivadoras porque la competencia se ve como un camino hacia el éxito.8

Esto podría parecer una línea de pensamiento habitual hoy en día, pero en aquella época la teoría psicoanalítica se centraba en gran medida en el sexo y la agresión como factores que influían en el comportamiento.7 En las décadas de 1940 y 1950, la teoría de la motivación basada en la reducción del impulso era la teoría más utilizada para explicar por qué las personas adoptaban determinados comportamientos. Esta teoría, propuesta por el conductista Clark Hull, afirma que nos comportamos para disminuir un impulso biológico, como el hambre, el deseo sexual o la necesidad de calor. Estos impulsos crean un estado desagradable, y Hull sugirió que eso es lo que nos motiva a adoptar comportamientos que los reducen.4

En "Motivation reconsidered", White también introdujo otro término relacionado con la competencia: effectance motivation. White contextualizó la eficacia como la motivación para ser eficaz y competente. La definió como una "tendencia a explorar e influir en el entorno "9 y sugirió que las personas aprendieran a participar en comportamientos en los que influyen con éxito en el entorno a través del refuerzo positivo. Para White, la competencia consistía en mejorar uno mismo.

En 1978, la psicóloga Susan Harter amplió las ideas de White en su artículo "Effectance motivation reconsidered: Hacia un modelo de desarrollo". Mientras que White sugería que las personas se sienten motivadas por el refuerzo positivo de la competencia, Harter quería plantear un modelo más sólido que demostrara que el grado de aprobación o desaprobación de los comportamientos de un niño determina su sentido de la competencia. Las personas, especialmente los niños, gravitan hacia aquello en lo que son buenos porque les hace sentirse bien consigo mismos. Cuanto más lo hacen, más competentes se vuelven. En un artículo posterior, de 1981, Harter desarrolló una escala para niños que contemplaba tres ámbitos en los que se puede alcanzar la competencia: cognitivo, social y físico.10

Más tarde, se empezó a hablar de competencia en relación con la capacidad de una persona para tener éxito en su función dentro de una organización. Podríamos hablar de competencia profesional. La gente empezó a investigar qué hacía a alguien competente en el trabajo y las formas de aumentar la competencia para el sector del desarrollo de la gestión.

Personas

Robert White

El psicólogo que primero iteró el término competencia académicamente. Sugirió que la competencia no era sólo el resultado de una tarea, sino el factor que impulsaba a realizar ese comportamiento. Creía que las personas adoptaban comportamientos en los que eran competentes porque les hacían sentirse bien consigo mismas.

Clark Hull

Psicólogo que intentó dar una expresión matemática a los fenómenos psicológicos. Creía que todo comportamiento podía explicarse mediante principios condicionantes. Hull desarrolló la teoría de la reducción del impulso, que sugería que la privación biológica creaba motivación.11

Susan Harter

Psicóloga que desarrolló modelos de competencia para diversos grupos de edad. Partió de la teoría de White, según la cual las personas estaban motivadas para participar en tareas en las que tenían éxito debido al refuerzo positivo. Creó escalas para clasificar los niveles de competencia de modo que la gente pudiera medirlos, ya que White sólo había hablado teóricamente de la competencia. En el caso de los niños, acabó desarrollando su modelo para incluir cinco dominios de competencia: escolar, deportiva, social, apariencia física y conducta. Más tarde, desarrolló una escala similar para adolescentes que incluía tres dominios adicionales: amistad íntima, atractivo romántico y competencia laboral.12

Stuart Dreyfus y Hubert Dreyfus

Un profesor de ingeniería y otro de filosofía, respectivamente, idearon en 1980 un modelo de adquisición de competencias para que las personas autoevalúen su nivel de pericia. Identificaron cinco etapas: principiante, principiante avanzado, competente, competente y experto. El modelo parte de la base de que la adquisición de destrezas es una cuestión de experiencia más que de destreza inherente y que, con el tiempo, las personas progresan desde la categoría de principiante hasta la de experto. Según su concepción de la competencia, la hipótesis es que un alumno tarda entre dos y tres años en ser competente. Cuando son competentes, conocen muchas normas y procedimientos necesarios para su función, pero no siempre saben cómo aplicarlos.13

Consecuencias

La competencia puede ser una mejor forma de predecir el éxito que otros indicadores, como la inteligencia. Aunque alguien pueda tener un coeficiente intelectual muy alto, eso no nos dice necesariamente si tendrá éxito en una tarea o función determinada. Dado que la competencia se mide como resultado del comportamiento, puede afirmarse que es una mejor medida del rendimiento.14

Comprender la competencia puede ayudar a las organizaciones a garantizar que sus empleados estén motivados para desempeñar su función mediante diversas estrategias. Si la competencia es un factor de motivación, los directivos pueden elogiarla cuando sea merecido. La afirmación positiva hará que el individuo se sienta bien, lo que a su vez hará que sea más probable que repita ese comportamiento.

Además, ser consciente de qué tipo de habilidades o características hacen que alguien sea competente en una función concreta puede ayudar a los recursos humanos a contratar al tipo adecuado de personas. En general, tener una definición clara de lo que engloba la competencia dentro de una organización garantiza que los objetivos de todos estén alineados y que los empleados sepan lo que se espera de ellos. Aunque la competencia puede variar de un equipo a otro, tener unas competencias sicas generales deja claro cuáles son los valores de la organización.15

Controversias

Algunas personas sostienen que considerar la competencia como factor motivador es demasiado conductista. Empieza con la sensación final del comportamiento -la sensación de que uno ha logrado completar adecuadamente una tarea- y luego atribuye esa sensación final como factor motivador. Aunque la teoría se alinea con las estrategias de aprendizaje de refuerzo positivo, la competencia en sí no puede observarse directamente: en realidad, estamos observando el rendimiento como un indicador de la competencia.16 Además, si asumimos que el modelo de desarrollo de competencias de Dreyfus y Dreyfus es correcto, tenemos que preguntarnos qué motiva a alguien a ir más allá de la competencia y trabajar para ser un experto, si se supone que la competencia es lo que motiva a los individuos a adoptar un comportamiento: debe haber otros factores que nos motiven.

Además, existen múltiples definiciones de competencia y muchos modelos de competencia, pero ¿es la competencia algo que se pueda medir realmente? Un directivo puede tener expectativas muy altas sobre lo que significa la competencia - ser un experto o realizar una tarea a la perfección - mientras que otro puede ver la competencia como la realización adecuada de una tarea. Como la competencia no es fácil de medir, es difícil establecer claramente las expectativas de competencia en una tarea.

COVID-19 y Competencia Médica

No es ningún secreto que han surgido muchos debates controvertidos a causa de la pandemia de COVID-19 y las medidas obligatorias. Ahora, más que nunca, la gente está empezando a cuestionar la competencia de los profesionales médicos y si están adecuadamente preparados y educados para dictar qué medidas se ponen en marcha.

La pandemia de COVID-19 existe a una escala tan vasta y no se parece a nada que hayamos experimentado en nuestras vidas. Muchos profesionales de la medicina tuvieron que asumir tareas que de otro modo nunca habrían realizado, y algunos prosperaron ante estos retos, mientras que otros fueron menos competentes. En su artículo "Questioning medical competence: ¿Debería la crisis de Covid-19 afectar a los objetivos de la educación médica?", el investigador en educación médica Olle ten Cate explora las causas que subyacen a estas diferentes respuestas y se pregunta si ahora necesitamos replantearnos qué es la competencia médica.17

Como menciona en el documento, una (de las muchas) definiciones de competencia es "la capacidad de responder a las demandas individuales o sociales para realizar una actividad o completar una tarea determinada". 17 Esto es mucho pedir a los profesionales de la medicina: la competencia es esencialmente su capacidad para responder adecuadamente a cualquier tipo de crisis médica. Cate critica esta definición de competencia médica, ya que no proporciona ninguna indicación de qué habilidades son exactamente necesarias para ser un buen profesional médico, lo que deja al sector mal preparado para pandemias como ésta.17

La investigación y el cuestionamiento de Cate sobre cómo debería ser la competencia médica en 2021 demuestran que los médicos y otros profesionales de la medicina tienen responsabilidades cambiantes y, con ello, su formación y educación deben garantizar que puedan ser "competentes" no sólo en su especialidad o en situaciones con las que estén familiarizados, sino competentes en una capacidad medicinal más holística.

Contenido TDL relacionado

¿Quién está ahí? Herramientas conductuales para mejorar el autocontrol

Algunos trabajos requieren habilidades específicas para que consideremos a alguien competente para el puesto, pero también hay habilidades más generales que pueden hacer de alguien una persona competente independientemente de la tarea. El autocontrol es una habilidad importante que permite a las personas centrarse en comportamientos que van a mejorar sus vidas, pero cómo lograr exactamente el autocontrol puede ser más complicado que la pura fuerza de voluntad. En este artículo, nuestro colaborador Tiago Rodrigo profundiza en qué es exactamente el autocontrol, cómo puede lograrse y por qué debe aprovecharse.

El problema de la posverdad

A menudo confiamos en la competencia de otros para tomar decisiones. Recurrimos a profesionales de la medicina, políticos y otras figuras de autoridad para que nos guíen. Esto se vuelve problemático cuando empezamos a considerar cuánta desinformación se difunde -especialmente en Internet- y que, a menudo, los intereses de los demás están en realidad reñidos con nuestros mejores intereses. En este artículo, nuestro colaborador Jason Burton explora el hecho de que nuestra sociedad parece carecer de responsabilidad epistémica y las consecuencias de la degradación del capital social.

Fuentes

  1. Alexander, A. (2018). Saber lo que no se sabe. Sociedad para el Avance de la Psicoterapia. https://societyforpsychotherapy.org/knowing-what-you-dont-know
  2. Citas sobre competencia. (sin fecha). Goodreads. Extraído el 18 de octubre de 2021, de https://www.goodreads.com/quotes/tag/competence
  3. Von Treuer, K. M., y Reynolds, N. (2017). Un modelo de competencias de la práctica de la psicología: Articulando Habilidades y Prácticas Complejas. Frontiers in Education, 2. https://doi.org/10.3389/feduc.2017.00054.
  4. Cherry, K. (2020, 17 de septiembre). La Teoría de la Conducción-Reducción y el Comportamiento Humano. Verywell Mind. https://www.verywellmind.com/drive-reduction-theory-2795381
  5. Miller, K. (2017, 14 de enero). 3 Ejemplos de motivación por eficacia. Future of Working. https://futureofworking.com/3-effectance-motivation-examples/
  6. Hyland, T. (1997). Reconsidering competence. Journal of Philosophy of Education, 31(3), 491-503. https://doi.org/10.1111/1467-9752.00070
  7. Robert Winthrop White (sin fecha). Harvard University - Department of Psychology. Obtenido el 18 de octubre de 2021, del sitio Web: https://psychology.fas.harvard.edu/people/robert-winthrop-white-0.
  8. van der Kooij, K., In 't Veld, L., & Hennink, T. (2021). Motivation as a function of success frequency. Motivation and Emotion, 1-10. https://doi.org/10.1007/s11031-021-09904-3
  9. White, R. W. (1959). Motivation reconsidered: El concepto de competencia. Psychological Review, 66, 297-333. https://doi.org/10.1037/14156-005
  10. DiBello, M. (s.f.). Motivación por competencias. Motivation at a Glance. https://sites.google.com/site/motivationataglanceischool/c-theories/competence-motivation
  11. Cherry, K. (2011, 1 de agosto). Biografía del psicólogo Clark Hull (1884-1952). Verywell Mind. https://www.verywellmind.com/clark-hull-biography-1884-1952-2795504
  12. Instrumentos de autoinforme Susan Harter. (sin fecha). University of Denver Portfolio. Obtenido el 18 de octubre de 2021, del sitio Web: https://portfolio.du.edu/SusanHarter/page/44210.
  13. Zeeman, A. (2019). Modelo Dreyfus de adquisición de habilidades. Tools Hero. https://www.toolshero.com/human-resources/dreyfus-model-of-skill-acquisition/
  14. Sieck, W. (2021, 17 de septiembre). ¿Qué es la competencia y por qué es importante? Global Cognition. https://www.globalcognition.org/what-is-competence/
  15. Competencia y competencia, ¿son lo mismo? (2021, 15 de febrero). Centranum. Obtenido el 18 de octubre de 2021, del sitio Web: https://www.centranum.com/resources/competency-management/competence-and-competency/.
  16. Madera, R. y poder, C. (1987). Aspectos de la distinción competencia-desempeño: cuestiones educativas, psicológicas y de medición. Revista de estudios curriculares, 19(5), 409–424. https://doi.org/10.1080/0022027870190503
  17. Ten Cate, O., Schultz, K., Frank, J. R., Hennus, M. P., Ross, S., Schumacher, D. J., Snell, L. S., Whelan, A. J., & Young, J. Q. (2021). Cuestionando la competencia médica: ¿Debería la crisis del COVID-19 afectar a los objetivos de la educación médica? Medical Teacher, 43(7), 817-823. https://doi.org/10.1080/0142159x.2021.1928619

Read Next

Notes illustration

Eager to learn about how behavioral science can help your organization?