Escasez
La idea básica
Disponemos de una cantidad limitada de recursos. Sin embargo, nuestro deseo de estos recursos es teóricamente ilimitado. Esta discrepancia entre oferta y demanda se denomina escasez. La escasez plantea el reto de asignar los recursos de manera que satisfagan el mayor número posible de necesidades básicas y demandas adicionales.1 La abundancia es lo contrario de la escasez.
Los principales ejemplos de recursos escasos son el tiempo y el dinero. Un médico, por ejemplo, puede tener un sueldo impresionante, pero trabajar más de cuarenta horas a la semana, lo que le deja muy poco tiempo para sí mismo. Cada recurso tiene un coste; en esta situación, la abundancia de dinero del médico le cuesta una cantidad significativa de su tiempo. Aunque algunos recursos puedan estar disponibles en una cantidad aparentemente enorme, siguen considerándose escasos, en un sentido técnico, porque sólo hay una cantidad finita disponible.