Cómo la retroalimentación ahorró a Virgin Atlantic Airlines 5,37 millones de dólares, 21,5 millones de kg de emisiones de CO2 e hizo más felices a sus pilotos.

Incentivos: Cualquier cosa que motive a una persona a hacer algo. Estos incentivos pueden ser morales, coercitivos o remunerativos.

Altruismo: El altruismo es la práctica de hacer sacrificios en beneficio de otras personas debido a nuestra preocupación por su bienestar. A menudo, estas acciones no nos ofrecen ningún beneficio recíproco directo, pero nos sentimos bien haciéndolas. Un gran ejemplo de comportamiento altruista es donar a organizaciones benéficas.

El cambio climático es el principal reto de nuestro tiempo. La amenaza existencial del cambio climático ha hecho necesarias formas sostenibles de consumo y producción si queremos asegurarnos un futuro mejor. Una forma de hacerlo es reducir el uso de combustibles fósiles. El actual nivel de consumo de combustibles ha provocado una sobreproducción de CO2, causante de un aumento del calentamiento global. La falta de medidas preventivas para frenar la producción de CO2 provocará una devastación ecológica.

Las principales repercusiones del transporte aéreo

Los avances tecnológicos y la globalización han permitido a muchos llevar una vida de gran comodidad y exploración. Los aviones han demostrado ser herramientas increíblemente útiles para abrir el mundo al comercio, los viajes y la mejora del bienestar. Por desgracia, también consumen mucho combustible. Aunque se vislumbra en el horizonte la sustitución de los aviones propulsados por combustible por una alternativa más sostenible, es preciso actuar con rapidez para mitigar los efectos más acuciantes del cambio climático.

Vuelos más ecológicos

Investigaciones recientes han demostrado que los pilotos tienen un gran poder de decisión sobre la cantidad de combustible que consumen sus aviones. En un estudio se planteó la hipótesis de que los pilotos tenían una visión optimista de su propio consumo de combustible: al pensar que ya estaban ahorrando bastante combustible, consumían involuntariamente más combustible del necesario. Una intervención conductual que incentivara a los pilotos a reducir su consumo de combustible podría ser una medida barata, inmediata y eficaz para disminuir la huella de carbono de las aerolíneas.

Los economistas Gosnell, List y Metcalfe se asociaron con Virgin Atlantic Airways para comprobar si una intervención conductual podía ser tan potente como se preveía. Dado que se trataba de un grupo de pilotos con mucha experiencia, sindicados y bien pagados, la capacidad de obtener más productividad de ellos es una hazaña impresionante.

Lo que midieron

El estudio analizó tres facetas del proceso de vuelo: la carga de combustible (la precisión con la que los pilotos evaluaron los niveles de combustible antes del vuelo), el vuelo eficiente (la eficiencia en el consumo de combustible del piloto mientras estaba en el aire) y el rodaje eficiente (la eficiencia en el consumo de combustible del piloto al conducir el avión tras el aterrizaje).

Las 3 condiciones experimentales

Los investigadores dividieron a sus 335 pilotos en tres grupos. El objetivo del diseño experimental era examinar los distintos efectos de cada incentivo en el comportamiento de ahorro de combustible de los pilotos. Los investigadores partieron de la hipótesis de que la falta de información era la principal razón del consumo excesivo, y decidieron que cada grupo de pilotos recibiría información sobre sus niveles de combustible.

1. El primer grupo de pilotos sólo recibió informes sobre el consumo de combustible del mes anterior. En esencia, se trataba de un grupo de control.
2. El segundo grupo también recibió información mensual, pero se le pidió que alcanzara unos objetivos de combustible personalizados un 25% inferiores a los del mes anterior.
   
   - Si lograban alcanzar dos tercios de sus objetivos, recibían un simple empujón en forma de "¡Bien hecho!" al pie de su papel.
   - Si no alcanzaban sus objetivos, se les animaba a volar de forma más eficiente.
   
3. El último grupo tenía los mismos informes de retroalimentación y los mismos objetivos personalizados que el grupo dos, pero los investigadores querían comprobar si los pilotos podían motivarse aún más con el altruismo. Añadieron otra dimensión: si los pilotos conseguían alcanzar sus objetivos, los fondos se destinarían a una organización benéfica de su elección.

Garantizar la libertad de los pilotos

El experimento se diseñó para que fuera totalmente autodirigido y a discreción de los pilotos. Utilizaba sistemas de incentivos que les permitían plena flexibilidad para utilizar cualquier medio que les permitiera alcanzar sus objetivos, en lugar de dictarles lo que debían hacer o insertar a otro directivo.

Ahorros millonarios: financieros y ecológicos

Los resultados de la intervención fueron asombrosos. En conjunto, teniendo en cuenta consideraciones de ingeniería y datos sobre combustible, las intervenciones permitieron ahorrar 5,37 millones de dólares y reducir las emisiones de CO2 en 21,5 millones de kg. Pero, ¿cuál de las intervenciones contribuyó más a estos resultados?

¿Qué ha funcionado mejor?

Los resultados mostraron que se producían mejoras significativas con sólo proporcionar información a los pilotos sobre el nivel real de su consumo de combustible. Esto apoya la hipótesis de que los pilotos intentan activamente ahorrar combustible, pero no son conscientes de su comportamiento derrochador de base. La intervención más eficaz fue la inclusión de objetivos personales; su aplicación redujo drásticamente el consumo de combustible en cada faceta del proceso de vuelo.

La caridad hace más felices a los pilotos

La donación benéfica, aunque siguió teniendo más éxito que el control, no pareció marcar mucha diferencia con respecto al segundo tratamiento. Sin embargo, cuando examinaron la satisfacción laboral, descubrieron que aumentaba en un 6,5% para los pilotos que realizaban donaciones caritativas. Por tanto, aunque puede que no sea la medida más eficaz para ahorrar combustible, parece que una intervención de comportamiento prosocial hizo más felices a los pilotos. Estas intervenciones eran de bajo coste y generaban beneficios medioambientales, empresariales y sociales.

• Los investigadores animaron activamente a los pilotos a controlar sus propios datos y preguntar qué datos se recogían de ellos
• Se consultó a los pilotos sobre el diseño del experimento, lo que permitió el máximo consentimiento
• No se abordó el tema de la seguridad, a pesar de la preocupación general que suscitan los viajes aéreos de pasajeros.